El Colectivo Paulo Freire Chile saluda el gran aprendizaje social que nos brinda “el jardín de las alegrías” de los jóvenes que nuevamente dan clases de dignidad y generosidad ante el triste espectáculo de la codicia, la corrupción y la resignación abúlica de tantos durmientes y bailarines del consumo.


Cuando uno decide el tiempo y el espacio para generar una acción de ruptura y liberación a la vez, está conquistando una nueva actitud y un universal que nos dice: es posible no solo pensar, sino también actuar en una lógica diferente a la del sistema.


Se inicia con la acción colectiva que confía en sus propias fuerzas y capacidades verificar espacios de libertad y una convicción que evidencia que “es posible vivir de otra forma”.


Los jóvenes estudiantes marcados por el frescor de la legitima irreverencia ante el poder y la pusilanimidad de muchos, marcados por la alegría de hacer de la vida un acto de libertad y creatividad, no se sojuzgan por una legalidad corrupta que baila al ritmo de la desigualdad y el abuso.
“No estamos dispuestos a vivir de la forma que nos enseñan en este mundo que nos entregan”.


No adherimos al cinismo cotidiano, a la enajenación y al abuso de todos los días de quienes en forma descarada hacen de la evasión una ley de privilegio.


No adherimos a esa forma de hacer política en que se constituyen en representantes del pueblo y los financia el gran empresariado.
No adherimos a una forma de vida donde el consumo, el clientelismo y la monetarización de las relaciones humanas han depreciado lo más importante, no solo en la reivindicación de los afectos humanos de la comunidad, sino también a nuestra madre naturaleza que nos enseña el respeto y cariño más básico y transversal como un solo abrazo sustentable.
Evadir, no pagar, una forma de luchar: es lo más cercano a una forma legítima de hacer política hoy pues está el universal que nos dice: “no bailes la música autodestructiva de la obediencia”, “es posible subvertir esta realidad impuesta, y si lo hacemos masivamente, el desconcierto los embriaga y desespera”.


¡Vamos estudiantes!: aprender de nuestra potencialidad y autonomía es conquistar otra legitimidad, la que nos han robado y secuestrado bajo el engaño del exitismo y la competencia del emprendimiento.


¡Vamos estudiantes!: hay que sacudir a los compañeros y compañeras de la política triste que se han enmarcado en el ritmo reactivo de la música del sistema y traerlos a la afirmatividad de la nueva conquista.


¡Estamos levantando un posible que nos enseña un nuevo horizonte de habitabilidad de este mundo!


Con acciones llenas de colorido y el disfrute de la conquista de la invención de este mundo que nos pertenece a todos, impulsamos Educación popular.


Clase, raza, género y todas las diferencias y multiplicidades entran en esta generosa acción de abrir las puertas y romper rejas para viajar libres en el territorio que nos pertenece.


Nadie educa a nadie, nadie se educa solo:

TODOS Y TODAS NOS LIBERAMOS EN COMUNIÓN!!!


COLECTIVO PAULO FREIRE CHILE
18 DE OCTUBRE DE 2019